Caminando por senderos indiferentes, de esos que solo un vagabundo habría podido describir. En el viaje observamos rostros, tantos rostros, un niño feliz con un carro de juguete,, una joven apenas con un par de lagimas callendo, un hombre maduro riendo a carcajadas, un anciano en silla de ruedas con el semblante serio y la mirada perdida.
Los sujetos interesados en su platica, de esas que te hacen ver las cosas más claras, de esas que te impulsan a encarar todos tus miedos, solo la interrumpian para aprovechar sus rollos de 24 fotografías, intentando obtener un reflejo estatico de esos lugares casi desconocidos y olvidados por el mundo.
Llega un momento en el que cae una brisa ligera con el unico proposito de decirnos alegremente,
"aca les toco estar, solo determinense con todo eso que hacen, y disfruten..."
Sentados en un sillon, se pasaron las horas entre el jazz y una botella de whisky, lo que se antoja a describirse como una noche bohemía.
hoy mi animo no es distinto, tanto que me rasure y me quite de encima todas las estupideces que no me dejaban despegar.
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